En tiempos de dificultad para la ampliación de derechos de los trabajadores, AMET hace votos por el reconocimiento merecido al motor indispensable de toda actividad destinada a generar bienes, servicios y crecimiento: los operarios, empleados y laboriosos prestadores de su fuerza vital para el desarrollo de un país que, necesariamente, debe apoyarse en los sectores del trabajo para salir de tan profunda crisis.
En lo que respecta a la actualidad estricta, decimos que nuestro rol seguirá siendo el mismo de tantos años, pues nos enfocamos en controlar las condiciones laborales a fin de que no se vulneren principios conquistados a lo largo de toda una historia de reivindicaciones. En especial, los preceptos custodiados por el artículo 14 Bis de nuestra Constitución Nacional.
Atravesamos una época de tensa vigilia en la que no debemos distraernos. Así trabajamos cotidianamente en la defensa de los trabajadores y de las instituciones que representan un camino de salida para el flagelo de la pobreza y la marginalidad. Entre esas instituciones, defendemos por supuesto la educación pública y la universidad gratuita, así como todo otro rol del Estado que deba ser prestado en beneficio de una sociedad más justa.
Por todo eso decimos con orgullo y esperanza ¡Feliz Día del Trabajador!
